Hoy alguien me preguntó cómo estaban, y me di cuenta de que no lo sé. No podía decirle qué cosas han estado haciendo. No podía decirle cómo pasan sus días y tampoco lo que es importante para ustedes últimamente. Me di cuenta de que sólo las conocí durante algún tiempo.
Solía hablar con ustedes todos los días, y me di cuenta en todos sus caprichos, sus preferencias y aventuras diarias. Yo siempre solía ser parte de ellas.
Se fueron con demasiada gracia de mi vida: Hicieron su reverencia y salieron por la parte izquierda del escenario. Nunca voy a olvidar ese 11 de noviembre, que quería contarles algo y me encontré con el cartel.
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Yo estaba en una escena de la obra, y finalmente el telón bajo sobre mí, dejándome en la oscuridad.
¿Saben? Yo solía echarlas de menos. También nuestras bromas, las conversaciones sin sentido, el recuento de lo que hacíamos juntas. ¡Solía extrañar tanto nuestra amistad! Pero nunca sentí que ustedes me extrañaran o que me echaran de menos. Así que, con el tiempo, dejé de extrañarlas.
No las culpo, estaba vibrando bajo, no me daba cuenta que muy probablemente, nadie quería estar cerca de una persona triste y oscura. Hasta que al pasar el tiempo me di cuenta que ustedes amaban a la amiga feliz, la que era de dar a manos llenas sin esperar nada a cambio. La que estaba ahí al pie del cañón, la que estaba para ayudarlas incondicionalmente si me lo pedían. Pero no puedo decir lo mismo de ustedes….
Pero saben algo… Hay algo que aprendí de ustedes.
A ser una mujer más fuerte, más feliz, con brillo y con amigos que se alegran de mis éxitos y frutos.
Gracias, por todos esos rumores iniciados, esos secretos contados, esas falsas sonrisas; no me preocupo, porque sé que hoy ustedes necesitan más de mí, que yo de ustedes y no sólo por el hecho de que no puedan sobresalir, sino porque sus actitudes han alejado a las pocas personas que estaban con ustedes. No les deseo el mal.
Solo una vida llena de amor y de luz, híper lejos de mí.
Porque hoy sé que la amistad no es llamar cuando necesito algo, es llamar porque quiero saber cómo estas. Y que en esta vida circular…
El universo saca fotos y tarde o temprano te pone en el lugar que mereces.
Y vos que estás leyendo esto, quizás te toque pasar momentos difíciles en soledad sin tus amigas de toda la vida, y quizás eso duela. Pero si algo te aseguro, es que todo pasa por algo.
Y hoy no solo estoy feliz de no tener amigas falsas en mi vida, sino que aprendí a reconocerlas y a relacionarme con gente que está feliz de tener una Nicole en su vida.
“No te preocupes porque una amiga que te traiciona, nunca ha sido una amiga”
Delia Martinez